La ecografía es la primera foto de tu bebé, la que más has esperado, la que te confirma que una nueva vida está creciendo dentro de ti.
El problema es que normalmente están impresas en papel que con el tiempo se puede estropear. O peor aún, algunos ginecólogos las dan en papel térmico, este papel dura muy poco tiempo y menos aún si se expone al calor o al sol.
La mejor solución para conservar a la perfección las ecografías de tu bebé es escanearlas y guardarlas en formato digital.
Después, si quieres, puedes hacer una reproducción fotográfica. Lleva el archivo de la imagen que has escaneado o la propia ecografía (si no tienes escaner o quieres una mejor resolución) a una tienda de fotos y que te saquen la fotografía. No es demasiado caro.
De este modo conservarás la primera, primerísima, foto de tu bebé para siempre!