Durante el diagnóstico de la ecografía se mide al feto desde su parte superior (cabeza-coronilla) hasta su culete (o rabadilla). Es por ello que, frecuentemente, no coincide la medida del bebé en su última ecografía con la que realmente tiene al nacer, es muy difícil determinar la medida exacta.
Haciendo esta medición en cada una de las ecografías, se puede determinar la edad gestacional del bebé. Normalmente, la edad fetal es más precisa en las primeras semanas de embarazo. A medida que va avanzando el embarazo, va siendo menos preciso, pues cada bebé sigue un patrón de desarrollo distinto que depende de múltiples factores.
Las medidas que se toman en las ecografías se pueden comparar con tablas de biometría fetal que incluyen una media de medidas y pesos según la edad gestacional. Pero hay que tener en cuenta que estos parámetros son estimados y pueden existir márgenes que pueden variar hasta un par de semanas, esto no debe ser motivo de preocupación.
En el caso de que la ecografía detecte alguna anormalidad en el desarrollo del bebé, el médico, te lo hará saber y establecerá las pautas a seguir para solventar el problema.