El fondo de armario de la embarazada

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La prueba ha salido positiva, estás embarazada, tendrás un bebé, y probablemente la última de tus preocupaciones en este momento será pensar en qué te vas a poner cuando tu vientre se haya expandido hasta alcanzar volúmenes nunca imaginados.

Pero conviene estar preparada e ir anticipando tu fondo del armario y es que cuando tu pancita esté grande y tus piernas hinchadas y doloridas por el aumento de peso y la retención de líquidos, te dará una enorme pereza salir a rastrear las tiendas para comprarte ropa. Entonces, la tentación de ponerte lo que tengas más a mano será más fuerte que el sentido del estilo.

Lo primero es recordarte que no tienes que comprar tallas enormes para dentro de dos meses, sino calcular en qué estación alcanzarás el tercer trimestre de embarazo, que es cuando más voluminosa será tu pancita. De esta forma, sabrás si conviene que te compres abrigos o trajes de baño, un vaporoso vestido floreado o un lindo suéter de lana.

Una regla de oro es que permanezcas fiel a tu estilo y trates de adaptar las prendas premamá a tu forma de vida. Hoy la oferta es enorme, y si en las tiendas no encuentras nada que te guste, también internet pone al alcance opciones casi ilimitadas.

Como una estrella de cine

Aunque es probable que no vayas a pisar una alfombra roja durante los próximos meses como sí hacen las estrellas del celuloide y otras famosas cuando están embarazadas, las celebridades pueden ser una fuente de inspiración inagotable en lo que a ropa premamá se refiere. El clasicismo de Angelina Jolie o Cate Blanchett, el estilo cómodo de la mexicana Salma Hayek, el “look” más juvenil de Jessica Alba o el glamour latino de Jennifer López.

Apuesta por los básicos

Sea cual sea la estación en que alcanzarás el tercer trimestre, recuerda que las embarazadas tienen habitualmente más calor debido a que su metabolismo basal aumenta. Ya sea invierno o verano, sudarás más. Esto significa que lo mejor es que elijas tejidos naturales como el algodón, el lino o la lana frente a otros sintéticos como el poliéster o el nailon.

Primero la ropa interior

Al principio podrás seguir usando la tuya sin problemas, pero según avance tu embarazo, tienes distintas opciones, siempre buscando la comodidad. Evita la ropa interior que oprima y elije tejidos naturales. Puedes optar por braguitas bajas que queden por debajo de tu pancita.

La elección del sostén es importante, ya que el pecho sufre modificaciones importantes durante el embarazo, aumenta algunas tallas y al principio del mismo puede molestar o doler bastante. Por ello, elije uno adaptable que no oprima y a la vez tenga buena sujeción.

¿Invierno o verano?

Si alcanzas tu mayor volumen en época invernal, necesitarás al menos dos pares de pantalones premamá (negro y natural, por ejemplo), que se adapten al contorno de tu barriga, un par de jerseys de lana, calcetines que no opriman la pierna y al menos un abrigo, tapado o gabardina que se adapte a tu estado.

Y si el final de tu embarazo es en el buen tiempo, es más fácil encontrar ropa a tu medida pues en verano puedes encontrar ropa más amplia e informal. Las prendas se pueden reducir a unas blusas fresquitas con unas mallas cortas premamá y algunos vestidos amplios y ligeros.

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