En la actualidad, el uso de la mayoría de los productos de limpieza son seguros durante el embarazo. Sí, incluso la lejía. Así que no tienes que recurrir a una criada para hacer la limpieza del hogar, a menos que lo desees. Si vas a tener que hacer el trabajo sucio tu misma, hay pasos que puedes tomar durante la limpieza para que tú y tu bebé estéis a salvo.
- Asegúrate de tener una buena ventilación donde estés limpiando.
- Usa guantes y ropa adecuada para proteger tu piel.
- Lee siempre las etiquetas de advertencia e instrucciones.
- Nunca mezcles productos químicos diferentes, tales como lejía con amoníaco; hacer esto puede ser muy peligroso para cualquier persona que inhale la mezcla.
- Evita la limpieza de espacios estrechos y sin ventilación.
- Si lo eres todo para tu pareja…, pídele que haga la limpieza!!
Si te sientes incómoda con los productos químicos de limpieza, utiliza productos naturales. El uso de bicarbonato de soda y el vinagre pueden hacer maravillas en la limpieza de casi cualquier parte de tu casa, desde la cocina hasta el baño.