Muchas mujeres desarrollan hemorragias nasales durante el embarazo. Son comunes y completamente inofensivas.
Causas de la hemorragia nasal durante el embarazo
El estar embarazada puede aumentar la presión en los vasos sanguíneos en la nariz, lo que contribuye a hemorragias nasales. También son comunes cuando se tiene un resfriado, ya que esta condición pueden contribuir a la irritación de las membranas.
El tratamiento de una hemorragia nasal
Si usted presenta sangrado nasal durante el embarazo, hay varios pasos simples que puede hacer para detenerlos.
– Siéntese y haga presión en el orificio nasal durante diez minutos hasta que desaparezca la hemorragia.
– No incline la cabeza hacia atrás, lo que provocaría que la sangre de la nariz vaya a la garganta y el estómago, lo que le puede producir náuseas y vómitos
– Otra opción es aplicarse hielo sobre la nariz. El hielo tiende a disminuir el flujo de sangre a través de los vasos sanguíneos.
La prevención de hemorragias nasales
Para prevenir o reducir al mínimo el número de hemorragias nasales durante el embarazo:
– Trate de usar un humidificador en su habitación por la noche para mantener la humedad del aire. El aire seco puede secar las membranas mucosas y contribuir a hemorragias nasales.
– Evite sonarse muy fuerte sobre todo cuando tiene un resfriado. Use papel suave.
– Asegúrese de beber mucho líquido durante el día para mantener el buen funcionamiento de las membranas mucosas.
– Puede darse un pequeñísimo toque de vaselina en el interior de la nariz para ayudar a prevenir que las membranas se sequen y así evitar el sangrado.
Si usted encuentra que las hemorragias nasales ocurren con frecuencia o que no es capaz de detener un sangrado a los diez minutos de aplicarse presión directa, consulte con su médico.