La leyenda de que los bebés vienen de París, surge porque en una región de Francia llamada Alsacia, es uno de los lugares predilectos de las cigüeñas que emigran desde África, por lo que es común que algunas de estas aves aniden en los techos de las casas.
Se dice que un par de cigüeñas anidaron en lo alto de una chimenea y que cuando estas se fueron la pareja que vivía en esa casa tuvo un bebé, por lo que se extendió la idea de que el bebé había sido traído por el pico de la cigüeña.
Si bien en su origen del mito no se mencionaba a París como la ciudad de donde veían las cigüeñas cargadas de bebés, sí se cambió París por Alsacia debido a que París es más reconocida por ser la ciudad del amor.