En el embarazo te darás cuenta que le vas a dar muchísima importancia a sentirte cómoda. Los tacones, ropas ajustadas o vestidos cortos pasarán a la historia. No importa lo coqueta y presumida que seas, antepondrás la comodidad, ante todo.
Durante el embarazo, cogerás unos kilos de más, de los cuales el 70 % se centra sobre todo en la barriga, pero, las demás zonas también se llevan su parte. Hay que tener en cuenta que esto no lo vas a poder evitar ni aún haciendo deporte, el peso aumentará. Otra cosa ya es que aumente más o menos, y eso, sí que está a tu alcance.
Pasarás de verte los pies a no hacerlo y de poder agacharte a no poder hacerlo. Es por este motivo por el que te sentirás muy incómoda con ropas muy ajustadas, cortas o poco elásticas. Necesitarás ropa que te dé amplitud de movimiento considerando las nuevas características que irá adquiriendo tu cuerpo. Por eso se creó la línea de ropa premamá, para poder ofrecerles a las mamás embarazadas ropa cómoda cuidando cada detalle.
Puedes seguir usando vaqueros, eso sí, de premamá. Ahora se han creado unos vaqueros que sólo lo son en la zona de las piernas, es decir, son de tela de vaquero (elástico) en la zona de las piernas y la parte de arriba la hacen de algodón elástico, de manera que ofrecen comodidad con estilo.
Igual sucede con los jerséis o camisas. La parte de la barriga la diseñan ancha para que puedas ir cómoda sin sentirte apretada. A nadie le gusta ir mostrando partes de nuestra barriga así como así.
Pero ahora pensarás… Y cuando acabe el embarazo, ¿qué hago con toda esa ropa? Efectivamente, esa ropa quedará inutilizada porque ya no podrás ponértela. Los vaqueros anteriormente mencionados te serán imposible ponértelos y las camisetas igual.
¿Qué hacer con la ropa de premamá tras el nacimiento del bebé?
- Arréglala. Si estás hecha toda una costurera o conoces a alguien que lo sea, puede que te guste seguir usando algunas de esas prendas haciéndoles algunos arreglillos.
- Dónala a gente que lo necesite. Con la cantidad de pobreza que hay en la actualidad y la cantidad de mujeres embarazadas que hay sin recursos, donar esa ropa puede suponer una gran labor. Estas mujeres le sacarán mucho partido y podrán tener ropa a su medida, seguro que se lo merecen.
- ¿Piensas tener otro bebé? Quizás te valga en el futuro. Piensa bien si tienes pensado en un futuro volver a quedarte embarazada. Si es así, no dudes en guardar la ropa, es cara y si ya la tienes, eso que te ahorras en futuros embarazos.
- Véndela. Ahora se lleva mucho el comprar cosas de segunda mano. Si tu ropa está bien cuidada y la vendes más barata que la compraste, tú te llevas un dinerito y la persona que te lo compra se ahorrará un pico que seguro que le viene genial.
Estas opciones son muy buenas a la hora de pensar qué hacer con la ropa premamá tras el nacimiento, porque tirarla a la basura… ¡sería un desperdicio!