Las ecografías durante el embarazo son una herramienta muy importante por muchas razones. Algunas mujeres creen que pueden ser perjudiciales para su futuro bebé, pero están muy equivocadas. Es todo lo contrario, la ecografía es la mejor manera de asegurarte de que estás haciendo lo correcto para el buen desarrollo del bebé. Además, previenen y ponen en alerta de posibles complicaciones que, sin ayuda de las ecografías, serían difíciles de detectar.
Las ecografías, no sólo son vitales para controlar el buen desarrollo del bebé, también son divertidas, emocionantes y muy gratificantes. Ver al bebé antes antes de nacer dentro de tu vientre es una de las experiencias más bonitas del embarazo y un recuerdo inolvidable. También, son ideales para establecer aún más el vínculo con tu bebé.
La primera ecografía del embarazo determina con mayor exactitud el tiempo de gestación cuando hay dudas. Además, las ecografías, ayudan al médico a establecer la fecha probable de parto, a controlar el peso y las medidas del bebé en cada momento de su gestación para asegurar el buen desarrollo y detectar posibles problemas en su crecimiento.
También, la ecografía es la herramienta que descarta ciertos defectos congénitos y trastornos genéticos como el síndrome de Down, ayuda a detectar complicaciones como rupturas o anomalías de la placenta y muchas otras complicaciones.
Como ves, todo son ventajas. Las ecografías durante el embarazo son fundamentales para controlar el buen desarrollo del bebé, para descartar posibles complicaciones y ayudan a diagnosticar con antelación irregularidades para así actuar a tiempo.