Debes cuidar con atención tu alimentación durante la lactancia. Puede parecer algo fácil y que no precise de cuidados, pero cuando das el pecho a tu bebé estás perdiendo muchas proteínas y calcio. Es el punto más exigente en la vida de la mujer en cuanto a su nutrición.
Este aumento de exigencias se debe al gran esfuerzo que debe hacer tu cuerpo para poder producir en torno a 800ml de leche al día, habiéndose instaurado ya la leche madura. Esta leche será, en exclusiva, el alimento de tu bebé hasta los seis meses de su vida, luego será un complemento junto a otros alimentos que deberás ir introduciendo poco a poco.
Así que es importante prestar toda la atención posible a tu nutrición.
Cuando das el pecho a tu bebé, debes consumir una media de 1.800kcal al día. La alimentación debe ser lo más equilibrada posible, aunque la distribución calórica ideal se caracteriza por:
– un 40 % en carbohidratos (patatas, cereales, pan, …)
– 30 % en vitaminas y minerales (frutas y verduras)
– 20 % proteínas y lácteos (huevos, aceite, leche, carne, …)
– 10 % azúcares y grasas refinadas (dulces, mantequillas y demás alimentos).
Siguiendo esta pirámide alimenticia, tu alimentación será correcta y no verás perjudicada tu salud si das el pecho a tu hijo o hija.
Estudiando una a una las necesidades nutritivas, verás que debes consumir alimentos que contengan las siguientes vitaminas: A, E, D y C. Éstas son importantes para no padecer anemia.
En cuanto a los líquidos, no tiene nada que ver su consumo con la producción de leche, pero sí es importante beber mucho para mantener el equilibrio de líquidos en tu organismo.
