No se sabe exactamente cómo los productos químicos y disolventes utilizados en las pinturas pueden afectar al bebé durante el embarazo. La respuesta más simple y segura es conseguir alguien que pinte la casa por ti.
La pintura se compone de muchos productos químicos y debido a que es muy difícil medir la cantidad de diversas sustancias que el cuerpo puede absorber, es casi imposible saber exactamente los riesgos que conlleva para las mujeres embarazadas.
Por supuesto, el riesgo por la exposición a productos químicos es mucho mayor para alguien que los inhala diariamente. Los investigadores no saben cuáles son las consecuencias para una mujer embarazada que sólo quiere pintar el cuarto de su bebé. Así que hay que sopesar los beneficios de la pintura contra el pequeño riesgo que puede correr tu bebé. Si decides pintar la habitación de tu pequeño, toma las siguientes precauciones:
· Limita el tiempo que pasas expuesta a la pintura.