Estar embarazada no es sinónimo de estar enferma, pero sí necesitarás algunos cuidados especiales como descansar bien o no cargar peso excesivo. En otras palabras, ¡debes dejarte mimar!. Veamos qué privilegios tendrás durante los siguientes 9 meses.
¡Fuera colas!
Tener que esperar una cola es algo realmente pesado, más aún cuando estás embarazada y sufres de dolor de espalda o náuseas. Por este motivo podrás encontrarte con supermercados, bancos, organismos públicos, etc en los que se permite que las mujeres embarazadas no tengan que esperar la cola.
Asientos reservados
Los medios de transporte públicos como el autobús o el metro siempre tienen asientos reservados a mujeres embarazadas, minusválidos o personas mayores. Si todos los asientos están ocupados ¡no te preocupes!, siempre hay alguna persona dispuesta a cederte su asiento.
Caprichitos
Da igual la hora que sea o lo que se te haya antojado, siempre encontrarás a alguien cerca que saldrá corriendo a buscarte aquello que quieres, aunque cuando te lo traiga ya no lo quieras…
¡A descansar!
Si te encuentras cansada, no te preocupes de nada, siéntate, pide que te hagan un masaje ¡y disfruta!.
Date algunos mimos
Cuando llegue el bebé es posible que no tengas tiempo ni para mirarte al espejo, al menos hasta que te habitúes a tu nuevo ritmo de vida. Por eso, aprovecha para hacerte todo aquello que necesites.
Siempre que lo necesites, pide ayuda
Puede ser a tus amistades o familiares, sea quien sea seguro que comprende tu estado y estará dispuesto a echarte una mano en aquello que necesites.